Cuando el niño tiene la mayoría de sus dientes, cerca de los dos años, es recomendable que aprenda a utilizar el cepillo de dientes, y así tener total autonomía poco a poco. Es importante que desde pequeños aprendan a cepillarse bien los dientes, y para ello, lo mejor es que los adultos seamos sus modelos. Igualmente, podemos intentar ayudarles con algunos consejos:
Cuando el niño tiene la mayoría de sus dientes, cerca de los dos años, es recomendable que aprenda a utilizar el cepillo de dientes, y así tener total autonomía poco a poco. Es importante que desde pequeños aprendan a cepillarse bien los dientes, y para ello, lo mejor es que los adultos seamos sus modelos. Igualmente, podemos intentar ayudarles con algunos consejos:
Consejos para que tu hijo aprenda a cepillarse los dientes:
- Todo debe ser divertido, por eso es aconsejable comprarles un cepillo colorido y con dibujos, que tenga las cerdas suaves.
- Si quiere dejarlo a medias, puedes proponerle algún juego mientras se cepilla, para que le dedique el tiempo adecuado, puede ser leer un cuento o ponerle un reloj de arena, o escuchar su canción favorita, por ejemplo. Enséñale a lavárselos como si fuera un juego.
- Lo ideal es que su hijo se lave los dientes 3 veces al día, después de cada comida. Aunque todos sabemos que eso es casi imposible, queremos recalcar la importancia que tiene el cepillado nocturno. Durante la noche, la saliva, que es un mecanismo que protege a los dientes contra la formación de caries, disminuye. Esto en muy importante, ya que si se quedan restos de comida mientras que su hijo duerme, el riesgo de formar caries por la noche es mayor.
- Es conveniente que siempre que se cepille lo haga con un adulto presente a la vez. Será más divertido delante de un espejo, donde el niño lo vea para asegurarse de que lo hace correctamente. Los adultos, tendremos que motivarles para que el niño se sienta mayor y autónomo, ya que así se sentirán mejor.
- Acostumbra al niño a no comer nada después de cepillarse.
- Debemos explicarles cómo deben hacerlo: moviendo el cepillo con movimiento horizontal, de barrido, eliminando cualquier resto de comida. Al principio les costará, pero poco a poco, siguiendo estos pasos, lo conseguirán. Acuérdate de lavar no solo los dientes, sino también la encía y no debemos olvidarnos de la lengua: siempre de dentro hacia fuera.
Ten paciencia e intenta aplicar estos consejos cada día. Poco a poco, tu hijo lo hará por sí solo. Esperamos que os haya servido y que lo pongáis en práctica.
Consejos para que tu hijo aprenda a cepillarse los dientes:
- Todo debe ser divertido, por eso es aconsejable comprarles un cepillo colorido y con dibujos, que tenga las cerdas suaves.
- Para ser buen ejemplo, límpiate los dientes con él, para que conozca bien la rutina, sin olvidar limpiar por fuera, por dentro y de forma horizontal. Enséñale a lavárselos como si fuera un juego.
- Si quiere dejarlo a medias, puedes proponerle algún juego mientras se cepilla, para que le dedique el tiempo adecuado, puede ser leer un cuento o ponerle un reloj de arena, por ejemplo.
- Es conveniente que siempre se cepille con un adulto presente, para asegurarse de que lo hace correctamente.
- Acostumbra al niño a no comer nada después de cepillarse.
- Acuérdate de lavar la lengua: siempre de dentro hacia fuera.
Un, dos, tres…
Cómo no, lavarse los dientes puede ser un juego, y será más divertido delante de un espejo, donde vea al adulto y a sí mismo haciendo lo mismo. Puedes abrir mucho la boca y sacar la lengua para empezar la rutina de higiene dental. Es importante que lo hagan a la vez, ya que a los niños les encanta hacer cosas de mayores, y así se sentirán mejor.
Debemos explicarles cómo deben hacerlo: moviendo el cepillo de arriba abajo, y sin olvidar la lengua. Al principio les costará, pero poco a poco, siguiendo estos pasos, lo conseguirán.
